lunes, 4 de junio de 2018

Los Pronósticos Cualitativos


Los diversos métodos estadísticos para realizar pronósticos están en su mayor parte dirigidos hacia los pronósticos económicos, de mercadotecnia, financieros y otras formas de predicción empresarial. Estos métodos se centran fundamentalmente en el corto y mediano plazos.
En el campo de los pronósticos tecnológicos y ambientales existen varias formas de predicción, que se enfocan al largo plazo. Dichos métodos cubren la predicción poblacional o demográfica, disponibilidad y costo de materias primas, evaluación del riesgo político, pronósticos gubernamentales y legislativos, predicción competitiva y, la predicción tecnológica.

La predicción tecnológica y ambiental no siempre proporciona un procedimiento detallado, ni presenta sus pronósticos como una respuesta numérica sencilla. El uso de tales métodos requiere de un entendimiento de los factores implicados en cada situación y una necesidad para adaptar el método a esa situación. Con dichos métodos es el experto quien es el procesador de hechos, conocimiento e información, más que algún conjunto de reglas matemáticas, como sería el caso con los métodos cuantitativos.

Los métodos de predicción tecnológica y ambiental se utilizan en tres tipos de situaciones:

La primera es la predicción cuando un nuevo proceso o producto dado llegará a ser ampliamente adoptado. Por ejemplo, una organización puede estar consciente de un cierto número de descubrimientos científicos que todavía no han sido aplicados y puede pretender pronosticar el momento en el cual su aplicación se hará más amplia. O una empresa puede interesarse en el horizonte temporal para la adopción de un nuevo proceso. Como un ejemplo, se puede considerar el desarrollo de la robótica y el problema de pronosticar el punto en que dicha tecnología tendrá amplio reconocimiento en las aplicaciones industriales. Esta información sería de interés para las empresas que manufacturan o venden robots y para quienes pueden explotar las oportunidades disponibles a través del uso de la robótica para mejorar su producción y reducir sus costos.

La segunda es predecir qué nuevos avances y descubrimientos se harán en un área específica. Por ejemplo, ciertas organizaciones podrían interesarse en lo que sucedería con los nuevos descubrimientos y avances médicos. Las corporaciones podrían desear pronosticar nuevos procesos y tecnologías que serán desarrolladas en su industria durante los próximos años, para ayudar en la planificación de los programas de ampliación de planta física, el desarrollo del mercado de largo plazo y las inversiones en investigación y desarrollo a largo plazo. También es importante ser capaz de pronosticar el costo de la energía y otras materias primas, porque los aumentos de tales costos podrían tener graves consecuencias en algunos países o empresas.

La tercera es la predicción de los tipos de cambios y patrones que podrían surgir de un área que está sufriendo o está a punto de sufrir un cambio primordial. Un objetivo principal es romper paradigmas e identificar la gama de posibilidades futuras. Aislar patrones y relaciones emergentes en tal situación es también deseable ya que los cambios tecnológicos afectarán inevitablemente las actitudes sociales, las que a su vez afectarán la demanda de productos y servicios y las innovaciones tecnológicas.